Arranca una nueva campaña contra la mosca de los frutos

Tras la aprobación del presupuesto, en el transcurso de una nueva reunión de la Comisión Provincial de Sanidad Vegetal (COPROSAVE), realizada la semana pasada, hoy comienza una nueva campaña de lucha contra la mosca de los frutos en el macizo citrícola del sur correntino, ubicado en el departamento de Monte Caseros. 

Cuatro aviones Air Tractor que pertenecen a una firma Santafecina, fumigan un basto sector del Departamento.
Como en ocasiones anteriores, la Dirección de Producción Vegetal es el área responsable del control de las tareas, que consisten en la aplicación aérea de un producto cuyo nombre comercial es Spinosad, proporcionado por el Programa de Control y Erradicación de Mosca de los frutos (PROCEM).

El plan de trabajo fue aprobado por la COPROSAVE y elevado al Programa Nacional (PROCEM) el jueves pasado, durante una reunión llevada a cabo en Entre Ríos.

El financiamiento para subvencionar las aplicaciones aéreas provienen del Fondo de Desarrollo Rural, constituido por la recaudación del Impuesto Inmobiliario Rural, cuyo 25% se destina a campañas sanitarias.

Los productores luego reintegran el 50% del costo de las aplicaciones, para dar continuidad al programa de control. Tanto los equipos aéreos, los técnicos y el producto ya se encuentran en el lugar para dar comienzo a las tareas a primera hora de hoy. 

Piloto y  funcionarios estudian las áreas de aplicación del plaguicida
Infomontecaseros charló con el delegado del Ministerio de Producción de la Provincia y coordinador de la región centro-sur de la provincia, Ing. Martín Irastorza, que nos explicó los alcances del operativo que se está implementando en el macizo del sur correntino para luchar contra una plaga de los citrus que suele ser nefasta para los productores, como lo es la mosca de los frutos.

El Ing. Irastorza, nos comentó que este es un plan que decidió aplicar el SENASA, como medida sanitaria que abarca el norte entrerriano y el sur correntino desde Concordia hasta Monte Caseros, dado que es una zona donde la mosca de los frutos tiene una mayor presencia y los distintos monitoreos muestran que en ésta época del año la población del insecto aumenta considerablemente.

Con la utilización del Spinosad, que es un plaguicida biológico de (Dow Agrociencias) es un insecticida de origen natural producido por la fermentación de una bacteria actinomiceto llamado Saccharopolyspora spinosa.

La bacteria fue aislada de una muestra de suelo de una fábrica de ron en una isla Caribeña.

El spinosad es una neurotoxina compuesta por una mezcla de las spinosinas A y D (de ahí spinosAD), las cuales son compuestos tetracíclicos de macrolidos que actúan sobre los receptores post-sinápticos de la acetilcolina nicotínica y los receptores GABA.

El spinosad es muy activo por ingestión y algo menos por contacto.  Los productos basados en el spinosad han sido registrados en más de 30 países para el control de plagas de lepidópteros, dípteros, algunos coleópteros, termitas, hormigas y trips.

El spinosad tiene muy poca toxicidad para los mamíferos y es clasificado por la Agencia de Protección al Ambiente (EPA) de los Estados Unidos como un producto de bajo riesgo toxicológico.

Una revisión reciente de la susceptibilidad de los depredadores y los parasitoides hacia el spinosad concluyó que este producto representaba uno de los insecticidas más seguros disponibles actualmente para la conservación de poblaciones de los depredadores.

Muestra de superficie rociada denominada "tarjeteo".
El funcionario provincial también explicó que el área determinada para la fumigación se aproximaba a las 23 mil hectáreas, abarcando todo el macizo antes mencionado y que en la zona de Bella Vista Corrientes, donde la producción citrícola está bastante desarrollada, no hace falta realizar este tipo de operativos de fumigación ya que la mosca de los frutos no tiene una presencia tan marcada como por estos lugares.

Los aviones fumigadores pertenecen a la empresa de fumigación Arturo y Raúl Stiefel, de Cañada Rosquín (Santa Fé), que opera regularmente con dos aeronaves Air Tractor en servicios de aeroaplicación para explotaciones agrícolas. En este caso se utilizaron cuatro aviones para abarcar la mayor cantidad de superficie en el menor tiempo posible dado que las lluvias, de producirse, restarían efectividad a la aplicación del plaguicida, porque lavaría rápidamente a las plantas fumigadas.

Con el despegue de cada avión se toma una muestra de la calidad de fumigación, que los idóneos llaman "tarjeteo", que consiste en colocar varias hojas de papel blanco sobre el suelo dispersas en línea recta por unos quince o veinte metros para que el avión, una vez en vuelo haga una pasada sobre las misma y arroje el líquido insecticida. De esa manera los especialista monitorean si la cantidad de gotas por metros cuadrados es la suficiente para abarcar las áreas determinadas con la efectividad que se espera.

Por otra parte, nos contaron que el operativo de aplicación del insecticida llevará unos cuatro días aproximadamente, siempre y cuando las condiciones atmosféricas así lo permitan.



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