La fuerza naval apostó el guardacostas Timbú en Puerto Corazón, lugar que fue blanco de pescadores furtivos paraguayos y brasileros que amenazaron con armas a personal de Recursos Naturales.
Luego de la invasión de lanchas paraguayas y brasileras a pocos metros de la costa argentina, Prefectura reforzó la zona para impedir la pesca furtiva y la transgresión de aguas jurisdiccionales.
El guardacostas Timbú, un buque de tipo shaldag, escoltado por otras patrullas de la fuerza naval se apostaron en Puerto Corazón, lugar que fue blanco de pescadores furtivos durante toda la semana.
Desde el inicio del operativo, Prefectura interceptó y secuestró una embarcación paraguaya en infracción y expulsó a sus ocupantes. La consigna es reforzar la zona y que los peces puedan seguir su rumbo.
Durante el fin de semana pescadores que zarparon con lanchas de gran potencia desde las localidades paraguayas de Coratei y Cerrito llegaron incluso a amenazar con armas a inspectores de la Dirección de Recursos Naturales cuando detuvieron a una embarcación en clara infracción.
Según trascendidos se trataría de embarcaciones brasileras con motores de hasta 300 HP guiadas por baqueanos paraguayos.
Antes del refuerzo del operativo y la llegada del guardacostas Timbú, la Prefectura de Puerto Corazón patrulló la zona con embarcaciones camufladas echando a los infractores de aguas argentinas, pero volvían a pescar una vez retirada la fuerza.
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