En los últimos días llamó mucho la atención la aparición de extraños animales en zonas urbanas de Corrientes.
En zona del barrio Ponce apareció una curiyú de casi 4 metros, y en el San Antonio Este un lobito de río.
Desde el Centro Aguará, su director Daniel Segovia aseveró que “la urbanización avanza sobre zonas naturales, y por eso aparecen éstos animales más seguido”.
“La urbanización va invadiendo zonas naturales, y por ahí estos animales quedan escondidos, sobreviviendo.
Hay dos posibilidades: una que realmente el animal tuvo la suerte de crecer viviendo muy escondidos.
Y lo otro es que hayan sido mascotas, y se les escapa: eso es común en monos y carpinchos”, explicó Daniel Segovia, en diálogo con La Dos.
“La curiyú era de 4 metros y la hallamos en inmediaciones de Ruta 5.
La verdad que fue toda una sorpresa. No es muy común… solemos encontrar ejemplares de 2, 3 metros… pero de 4 metros nunca.
Fue una sorpresa”, admitió.
El referente del Centro de Conservación saludó la decisión de la UNNe de impulsar la formación de profesionales veterinarios especializados en Fauna Silvestre.
“Veterinaria de la UNNe comenzó a impulsar la formación de éstos profesionales especializados en fauna silvestre. Eso posibilita el cuidado y la protección de los animales autóctonos.
Ellos colaboran mucho. Ahora tenemos seis voluntarios que están con nosotros y en el Centro tienen hasta un espacio donde viven con todas las comodidades”.
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