Sé que es duro el título de la nota, pero es imposible no contar lo que pasa en los algunos lugares de nuestra localidad.
En esta "vivienda" de tres por tres, conviven dos adultos y tres menores, sin baño. |
Monte Caseros una ciudad rica y próspera económica y culturalmente, tiene una gran deuda con muchos de sus pobladores, que pasan las de Caín, sin trabajo y sin posibilidad de desarrollar una vida más o menos digna.
Es cruel el sistema que década tras década va dejando al costado a muchos de nuestros compoblanos, al margen de todo tipo de posibilidades de prosperidad.
Algunos dicen "es que a la gente les gusta vivir sin trabajar", y con eso se justifica casi todo, y damos vuelta la página y nos olvidamos de nuestros prójimos.
En tiempos electorales los políticos de casi todos los partidos pasan por esas casillas de madera, cartón y nylon a prometer materiales, ayuda, trabajo y quién sabe cuántas cosas más, siempre y cuando lleguen al poder.
Les prometieron ayudarlos; así los dejaron. |
Muchos llegan a ese ansiado espacio de poder, pero lamentablemente aquellas promesas que se hicieron se olvidan y cada vecino que confió queda peor de lo que estaba; porque no solo no lo ayudaron, sino que además masculla la bronca de haberse sentido un paria, que ni es digno de ser atendido por el intendente de turno.
Por otro lado los que prometieron "Vamos a estar mejor en Monte Caseros", cumplieron con esa parte; indudablemente que ellos (los políticos) están mejor, no sólo en Monte Caseros, si no también por otros lares.
Y demuestran sin ningún tipo de pudor, cómo les cambió la vida el poder y lo viven a sus anchas, y organizan fiestas y más fiestas, mientras la gente, el pueblo, observa su inescrupuloso crecimiento.
Mientras tanto los vecinos esperan, ya sin fe, que algunos de aquellos que golpeó la puerta de sus casas, recuerde su compromiso antes de las próximas elecciones.
Pablo Lugo.
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