Como todos los siete de Agosto, una larga fila de peregrinos caminó con fé y alegría hacia la capilla del Santo italiano ubicada en la zona rural de nuestra ciudad.
En autos, motos, bicicletas, a pie o a caballo, los devotos del Santo se congregaron en la capilla hermosamente presentada para compartir una jornada de gratitud y recogimiento espiritual en honor a San Cayetano.
Los caminantes, mayormente jóvenes, en grupos de a cuatro o seis personas marchaban en ambas direcciones sobre las banquinas de la ruta provincial 129 donde las patrullas de la Policía local custodiaba la seguridad de los mismos, como así, las unidades de la Patrulla Ciudadana apostadas en diferentes puntos y acompañando a los jinetes que marchaban hacia el punto de encuentro.
Dentro de la iglesia atestada de creyentes, el cura Ramón Espinoza pronunciaba la misa en conmemoración del Patrono del pan, la salud y del trabajo. En el amplio predio de la capilla, las personas disfrutaban de una mañana soleada realizando actividades recreativas, haciendo deportes, escuchando música, tomando mates y otros descansando del largo trajinar.
La ambulancia municipal trasladó alrededor de las 10,30 a una mujer de unos 35 años que se había descompensado hacia la ciudad, y luego retornó a la capilla para seguir dando asistencia a los peregrinos.
Como es habitual los artesanos y pequeños feriantes, instalaron sus puestos en las inmediaciones de la capilla ofreciendo sus productos a las cientos de personas que se congregaron durante el día. Por otra parte, largas parrillas encendidas aprestaban el tradicional asado preparado por expertos.
El cierre de la actividad religiosa está programado para la tarde de hoy con una procesión y misa estipulada para las 16, donde se espera una mayor concurrencia de los devotos.
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