El superclásico argentino estaba igualado sin goles cuando los jugadores de River sufrieron un ataque al salir del vestuario para jugar el complemento. Tras una hora fue suspendido el encuentro.
El
superclásico entre Boca Juniors y River Plate por los octavos de final
de la Copa Libertadores fue suspendido esta noche antes de comenzar el
segundo tiempo, a raíz de verse afectados cuatro jugadores del equipo
"millonario" por emanaciones de gas pimienta lanzadas dentro de la manga de salida al campo de juego.
La suspensión fue determinada por el árbitro del encuentro, Darío
Herrera, luego de recabar por espacio de 45 minutos todos los elementos
de evaluación que surgieron de fuentes médicas y autoridades de la
Conmebol.
Varios jugadores de River Plate se
vieron afectados por las emanaciones de gas pimienta que lanzaron desde
la tribuna de Boca a la manga por donde salían a jugar el segundo
tiempo, lo que derivó en un escándalo con conatos de agresión entre los
técnicos Marcelo Gallardo y Rodolfo Arruabarrena y el ingreso del propio
presidente "millonario", Rodolfo D'Onofrio al campo de juego.
Efectivos de la policía federal labró un acta en La Bombonera por la agresión que recibieron jugadores de River y secuestraron camisetas de los futbolistas más afectados.
Según se informó, las casacas que se llevaron los agentes fueron las de Matías Kranevitter, Lionel Vangioni, Ramiro Funes Mori y Leonardo Ponzio, los más perjudicados.
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