Desde la Fundación Miguelito Rosbaco acompañan a Rosa Batalla, la mamá de Isondú y Aitana que fueran asesinadas hace un mes en Parada Acuña.
4-7-24
Este jueves se cumplió un mes exacto del doble crimen ocurrido en Parada Acuña, cuando un sujeto que está detenido, asesinó a las hermanas Fernández y luego se mantuvo fugitivo por cinco días.
En conversación con nuestro medio Patricia Pelichero referente de la Fundación expresó "lamentablemente las víctimas se siguen sumando".
En tanto la Dra. Leticia Abraham adelantó "me voy a constituir en las próximas horas como querellante, si bien la querellante va a ser la Fundación", comentó
El caso que se investiga es por Doble Femicidio; la querella puede calificarlo de otra manera, "la calificación está bien, es un doble femicidio".
La pena en expectativa de este delito es de prisión perpetua.
El detenido por la justicia es Antonio Villalba, "está imputado ante la fiscalía de esta ciudad y tiene una medida de coerción de prisión preventiva por tiempo indeterminado", señaló la abogada.
La palabra de Rosa Batalla
Ante la pregunta de cómo se encontraba, dijo "no sé decirle que estoy bien porque no lo estoy".
"Acá sigo y agradezco a las Sras. de la Fundación que me invitaron a estar acá presente".
Rosa contó que su hija mayor "tenía un terreno con su pareja en el que estaban construyendo una casa y como yo trabajo, entonces ella (por Isondú) me pidió traer a su hermanita (Aitana) con ella; entre semana estaba con ella y los fines de semana conmigo", explicó.
La mujer contó cómo se enteró de la terrible noticia al decir "a mí por parte de la policía, ellos en ningún momento me avisaron, yo me enteré directamente por los medios y por mi marido que trabaja cerca del lugar".
"A él le mandaron mensajes del pueblo cerca de ahí, que estaba lleno de policías la casa de mi hija; la policía en ningún momento fueron a avisar en mi casa", dijo Rosa.
Sobre la relación del imputado detenido Antonio Villalba con sus hijas y Zárate la pareja de Isondú, explicó que "él estaba allí porque les estaba ayudando a construir una casita precaria".
"Estaba los fines de semana y a veces se venía para el pueblo y así; por eso él estaba con ellos", contó.
También confió que Villalba era un conocido de toda la vida "era como un hermano para mí y para ella como un tío".
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