El periodista Daniel Solmoirago en conversación con A LA HORA SEÑALADA.
Brindó detalles sobre el caso de la asociación ilícita que involucra a varios profesionales, funcionarios de la Dirección de Catastro y del Registro de la Propiedad Inmueble.
Quienes se dedicaban a adulterar documentación de terrenos para apropiarse de los mismos y venderlos con escrituras, títulos y mensuras falsificadas.
Solmoirago en este testimonio incluso da nombres y apellidos de algunos de los integrantes de ésta banda.
Solmoirago desde los medios que dirige, 1588 y Canal Taragüi, dio a conocer el hecho a través de una investigación exclusiva.
Vale señalar que la semana pasada la prefectura por orden de la jueza que entiende en la causa, realizó allanamiento y varias detenciones.
En esta causa "los ladrones tocaron el timbre" comienza señalando el colega, y agrega: "la denuncia se hizo en agosto del 2021 y llevó todo un procedimiento de investigación, si actuó Prefectura imagínate que el periodismo difícilmente iba a tener acceso, cuando la justicia provincial pide colaboración a las fuerzas federales es porque no confía en la policía provincial, eso es lo que hay que analizar primeramente".
"Esto lo tendría que analizar el ministro de seguridad y también el gobierno provincial, si la justicia ya no le hace intervenir a la policía local en procedimientos de ésta naturaleza donde hay corrupción contra el estado, como en este fraude donde se pidió la jueza colaboración a la fuerza federal".
"Cuando yo digo el ladrón toco el timbre es porque esto es un fraude que ocurre hace muchos años.
Para armar esta estructura de fraude sí o sí tenés que tener gente dentro de los organismos, tanto del Registro de la Propiedad Inmueble como de Catastro.
Y el resorte para armar esta estructura de fraude pasa exclusivamente por esos organismos, o sea que si no tenés personas adentro que estén también en el negocio y faciliten, este negocio no sale.
Los jefes de la banda siguen estando libres, no están imputados y están tranquilos".
"Esto salta por un terreno en Santa Ana, el último de cien que se hicieron igual, y te estoy diciendo cien no por tirar nomás un número como se suele decir, no, fueron cien, si no es ciento uno o noventa y nueve pero por ahí pasa el número".
Cómo operaban, a modo de ejemplo:
"Los padres o los abuelos de una persona tenían un terreno en Laguna Soto, eran viejitos y se murieron de golpe, el hijo o nieto está en Santa Cruz viviendo, las personas que integraban la banda husmeaban todo eso.
¿Pero cómo husmeaban, cómo podían saber todo eso?
Que estaban esos abuelos o padres que se murieron y que hace mucho tiempo tenían esos terrenos…teniendo acceso al Registro Civil de las Personas.
Hay un organismo que todavía no está entrando en la causa que es el Registro Civil; esta organización que involucra a autoridades de alto rango de estos organismos.
Entonces, se enteran, saben cuando fallecieron, no hay reclamo inmediato, no hay sucesión abierta, acá ya viene otro mosaico, la justicia, totalmente: no hay sucesión abierta, nadie reclama o sea si no hay sucesión abierta vos tenés que esperar un ratito mediano aunque sea dentro del Poder Judicial.
O si no, cómo vas a saber si hay o no sucesión, tenés que tener también un eslabón ahí adentro".
"Hay inclusive falsificados fallos de jueces, acá en la causa se va a tener que comprometer a un fiscal muy importante.
O sea yo voy y hago una mensura, esta banda contrataba al agrimensor que me mensure ese terreno que yo sé que se murieron los abuelos que eran los propietarios.
Falsifico un acta de defunción y van a fallecer recién un tiempo después de la mensura, que yo hago, entonces yo retrocedo en el tiempo simulo una venta de esas personas que se murieron que supuestamente me la hicieron a mí.
Me vendieron los muertos, pasa que me vendieron antes de morirse cuando en realidad ya estaban muertos, esa es una clase de esquema de cómo operaban".
"El otro esquema que hacían era impulsar una prescripción veinteñal porque esas personas que se murieron, aparece otra que fabrica una cesión de derechos que le dieron, entonces con la cesión de derechos practica una prescripción adquisitiva.
El agrimensor tiene que hacer una mensura y el objeto de la mensura al final es prescripción adquisitiva, la mensura termina con el objeto final de prescripción adquisitiva.
Acá vienen donde están involucrados todos: la prescripción adquisitiva de una mensura no te habilita a hacer un título y menos una escritura porque es una prescripción que tiene que tener el fallo de la justicia.
La única mensura que te habilita a escriturar o a hacer un título es la mensura de dominio o mensura de división cuando los herederos están terminando la sucesión y después a escriturar el pedacito que le tocó a cada uno.
La prescripción no te habilita, pero de la mensura una copia queda en Catastro, otra copia la tiene el agrimensor y otra copia el cliente que mandó a hacer la mensura, el original.
De Catastro hay que ir al Registro de la Propiedad Inmueble a inscribir y empezar el proceso de titulación o escrituración".
"La parte final que era el objeto de prescripción adquisitiva, ahí entraba la adulteración, no falsificación sino adulteración, entonces adultero el final en lugar de ir a prescripción adquisitiva pongo mensura de dominio.
Entonces cuando llego al Registro de la Propiedad llego como mensura de dominio y empiezo el tema del título, logro el título y después vendo por supuesto" explica el periodista en un extenso testimonio que se deberá escuchar de principio a fin para conocer nombres y apellidos de los integrantes e implicados en estos fraudes.
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