Luego de 24 horas de permanecer en la morgue judicial, el forense que llegó desde Paso de los Libres le practicó la operación de autopsia al cuerpo de Matías Martínez, que murió ayer en una situación poco clara, que obligó al fiscal Soto a abrir una investigación que explique el tema.
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| Familiares de Matías se quejan ante el fiscal, por las condiciones de la morgue. |
Los familiares del chico muerto estaban esta mañana cansados de esperar que alguien les de una explicación de lo sucedido y que le entreguen el cuerpo de Matías que permanecía en un cuartucho precario sin ninguna medida de conservación, esperando que los forenses llegaran de la vecina ciudad fronteriza.
Mientras tanto, Claudia Pereyra y Rubén Martínez, los padres del chico, declaraban en la comisaría local a requerimiento de la justicia, durante varias horas de la mañana. El resto de los familiares que llegaron desde distintos puntos del país, pero mayormente desde la provincia de Misiones de donde son originarios, estaban en la incertidumbre total dado que nadie se acercaba a darles una palabra sobre los hechos que llevaron a la muerte a Matías, ni tampoco cuando podrían disponer del cuerpo para su sepelio.
Cerca de las once de la mañana se hizo presente el Forense y casi al mismo tiempo el fiscal Soto que abrió un expediente sobre el caso donde se investigan las causas de la muerte del joven que ingresó al hospital Róbinson con un dolor en la rodilla y seis horas después terminó falleciendo.
A las trece treinta aproximadamente terminaron los peritos de realizar la operación y hablaron calmadamente con los numerosos familiares, a la salida del depósito judicial. El médico forense charló principalmente con los padres de Matías, evidentemente quebrados por la situación y la angustia.
Luego el fiscal habló con los medios presentes y aclaró algunos puntos del caso aunque no reveló información acerca de las razones que produjeron la muerte del chico. Soto dijo que ordenó el secuestro de las historias clínicas y los libros de guardia, tanto del hospital de Mocoretá como del Róbinson, para determinar cuales fueron las responsabilidades y prácticas que le realizaron a Matías en las horas previas a su muerte.
Soto indicó que el cuerpo del chico, no presentaba lesiones traumáticas ni de violencia y que a priori la muerte se habría realizado por razones clínicas; confirmó también lo que los familiares decían acerca de las ampollas que presentaban los brazos y piernas de Matías. El fiscal dijo que comenzó la investigación de oficio, cuando se enteró del fallecimiento del joven.
Los familiares de Matías reclamaron airadamente al fiscal Soto la precariedad de la morgue judicial y se manifestaron disconformes con la situación de abandono del cuerpo del chico en ese lugar tan poco adaptado a las necesidades que requiere la situación.
Luego de entregado el cuerpo los familiares llevaron los resto del adolescente a su ciudad de origen para el sepelio, mientras en Mocoretá según datos aportados por José Chaparro periodista de FM Encuentro el resto de los familiares y los amigos de Matías estaban esperando el arribo del cuerpo desde tempranas horas de la mañana de este Viernes.
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