En San Juan. Argentina goleó 5-0 a Bolivia y hoy parte a Chile, donde el próximo sábado debutará en la Copa América. Agüero, tres, y Di María, dos, los goleadores.
Lo que debe quedar en claro es que este partido sirvió para que Gerardo Martino
pudiera ver en campo la idea táctica que, entiende, debe llevar el
equipo nacional: con mucha movilidad de mitad de cancha en adelante,
permanente proyección de los laterales, mucha rotación ofensiva y
permanentes relevos en la zona central. El partido, definitivamente, no
sirvió para medir la fuerza del equipo nacional por lo endeble del rival
de facilitar absolutamente la tarea.
La jerarquía de Ángel Di María y del “Kun” Agüero,
acompañada por la del resto de los jugadores argentinos, permitió una
exhibición a placer de Argentina en Cuyo. Cuando quiso, marcó goles;
cuando prefirió conservar el balón, también lo hizo a placer; y cuando
resolvió que el partido estaba terminado, se dio el lujo de jugar con
uno menos.
Cabe decir que, sin duda, lo más valioso del encuentro fue la
inyección de ánimo que le entregó al equipo de Martino, que hoy se va a
Chile, con la obligación de ser protagonista e intentar quedarse con la
Copa América. La expectativa de la gente que vino a ver a las súper estrellas albicelestes se cumplió porque la selección exhibió
momentos de buen juego, en especial en la primera media hora del
partido.
Finalmente, el partido en sí no resiste mayores comentarios porque
fue muy abrumador lo que un equipo hizo con respecto al otro. Sí queda
claro que no era un partido más para el “Kun” Agüero, que es uno de los
pocos que aún lucha por ganarse un lugar en el equipo titular y que, con
sus tres goles, demostró que es el firme candidato a ser el compañero
de Lionel Messi en la ofensiva. Obvio está que Carlos Tevez y Gonzalo
Higuaín pretenden arrebatarle este puesto.
La gente en San Juan vino a decirle a la Selección: “Queremos la
Copa”. Lo hizo colmando el estadio, aplaudiendo y alentando sin
demasiada euforia, pero sí con claras muestras de cariño hacia este
grupo de futbolistas.
Argentina es, sin lugar a dudas, una de las mejores selecciones del
mundo por la capacidad individual de sus futbolistas, por el juego
colectivo que muestra y por el respeto que despierta en sus adversarios.
Este combo hace que la Copa América pase a ser una obligación.
mundoD
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